Amabilidad.
Palabra que parece en deshuso,
casi en peligro de extinción.
No entiendo en que momento comenzó a ocurrir esto,
quizás al mismo tiempo
en que empezamos a tener prisa
por llegar a ningún lado,
podría ser...
Hemos aprendido a pasar sin saludar
e incluso aparentar que no "vemos"
a las demás personas,
con la autoexcusa: tengo prisa, llego tarde!
Como si usáramos orejeras de burro.
Me entristece mucho, la verdad.
Siento que sin darme cuenta,
la carencia de amabilidad
la integré como algo "normal"
en el mismo lugar donde etiqueto de "normal"
muchas cosas
sin tener conocimiento de qué es "normal"
según para cada cual.
Lo curioso ocurre cuando descubres
que aún hay seres que usan la amabilidad
sin pretender nada a cambio.
Porque hemos llegado al punto
en que si nos tratan bien,
automáticamente subimos el muro defensivo...
Uy! qué andará buscando...
Olvidamos
que tenemos derecho al buen trato personal,
simplemente porque todos estamos hechos
de la misma esencia
y la empatía es gratuita.
Qué cosas, verdad?
va a ser que la usamos poco...
Hace poco alguien inesperado
me trató con amabilidad y una especie de cariño
y ante mi particular sorpresa,
noté que en algún lugar se unían
algunas de mis partes rotas,
como si se fuesen fusionando
con esa sensación de calor humano
tan vivo en mi recuerdo.
Tan poca cosa, verdad?
y a la vez con tanto poder.
La sensación fue muy bonita,
algo muy de agradecer
en estos tiempos que "corren"...
Me fui a mi casa como si me hubiesen hecho un regalo.
Gracias!
Laura
Palabra que parece en deshuso,
casi en peligro de extinción.
No entiendo en que momento comenzó a ocurrir esto,
quizás al mismo tiempo
en que empezamos a tener prisa
por llegar a ningún lado,
podría ser...
Hemos aprendido a pasar sin saludar
e incluso aparentar que no "vemos"
a las demás personas,
con la autoexcusa: tengo prisa, llego tarde!
Como si usáramos orejeras de burro.
Me entristece mucho, la verdad.
Siento que sin darme cuenta,
la carencia de amabilidad
la integré como algo "normal"
en el mismo lugar donde etiqueto de "normal"
muchas cosas
sin tener conocimiento de qué es "normal"
según para cada cual.
Lo curioso ocurre cuando descubres
que aún hay seres que usan la amabilidad
sin pretender nada a cambio.
Porque hemos llegado al punto
en que si nos tratan bien,
automáticamente subimos el muro defensivo...
Uy! qué andará buscando...
Olvidamos
que tenemos derecho al buen trato personal,
simplemente porque todos estamos hechos
de la misma esencia
y la empatía es gratuita.
Qué cosas, verdad?
va a ser que la usamos poco...
Hace poco alguien inesperado
me trató con amabilidad y una especie de cariño
y ante mi particular sorpresa,
noté que en algún lugar se unían
algunas de mis partes rotas,
como si se fuesen fusionando
con esa sensación de calor humano
tan vivo en mi recuerdo.
Tan poca cosa, verdad?
y a la vez con tanto poder.
La sensación fue muy bonita,
algo muy de agradecer
en estos tiempos que "corren"...
Me fui a mi casa como si me hubiesen hecho un regalo.
Gracias!
Laura
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